Las ostras gallegas, planas o rizadas, son famosas en el mundo entero. Tras comprar ostras gallegas, es normal que surjan dudas en torno a ellas. Una de las más comunes es acerca de si se pueden congelar las ostras.
¡Sí! Las ostras se pueden congelar. No obstante, para no equivocarte es importante que sigas los pasos que te dejamos a continuación, así te aseguras congelarlas de forma segura para degustarlas cuando te apetezca.
¿Cómo congelar ostras paso a paso?
Para congelar las ostra correctamente, sigue estos pasos:
- En primer lugar, congela únicamente las ostras frescas y vivas. Es importante que congeles las ostras que están cerradas y que deseches las que estén abiertas o en mal estado, porque podrían estar malas o contaminadas. Las ostras frescas y vivas suelen tener un aspecto brillante y oler a mar o a sal.
- Una vez seleccionadas las ostras en buen estado, lo siguiente es limpiarlas bien y eliminar los restos de suciedad que puedan tener. Para lavarlas, simplemente utiliza un colador y enjuaga con suficiente agua fría. Aclara dos veces para que queden completamente limpias.
- Con ayuda de un cuchillo, quita la ostra de la concha. Para abrir la ostra correctamente, simplemente dale la vuelta, identifica el punto de entrada y mete la punta de un cuchillo, haz una ligera presión y se abrirá. Luego, quita la carne. Solo nos interesa conservar la carne, la concha puedes tirarla.
- Al meter la punta del cuchillo verás que la carne de la ostra suelta líquido. Se le conoce como esencia de ostra y está bastante rico. Si quieres, puedes guardarlo en un taper hermético para hacer un caldo o fumet.
- Por último, una vez hayas retirado todas las carnes de sus conchas, solo queda que las coloques en una bandeja o taper sin que se toquen entre sí. Cuando se congelen, puedes pasarlas a una bolsa para que te ocupen menos espacio.
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Pasos para congelar ostras |
Descripción |
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1. Selecciona ostras frescas y vivas |
Escoge ostras que estén cerradas y en buen estado. Desecha las abiertas o en mal estado. |
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2. Limpia las ostras |
Lava las ostras con agua fría utilizando un colador. Aclara dos veces para eliminar la suciedad. |
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3. Retira la carne de las conchas |
Utiliza un cuchillo para abrir las ostras. Retira la carne y descarta las conchas. |
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4. Guarda la esencia de ostra (opcional) |
Si deseas, guarda la esencia de ostra en un recipiente hermético para utilizarla en caldos o fumets. |
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5. Coloca las carnes en una bandeja o taper sin que se toquen entre sí |
Distribuye las carnes de las ostras en una bandeja o taper para congelar. Asegúrate de que no se toquen entre sí. |
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6. Congela las ostras |
Una vez que las ostras estén colocadas en la bandeja o taper, mételas en el congelador. Luego, puedes transferirlas a una bolsa para ahorrar espacio. |
¿Cómo preparar las ostras?
Para preparar las ostras congeladas, lo primero es descongelarlas de manera segura. Hay 2 formas de hacerlo:
H3: Descongelar las ostras en el frigorífico
La mejor forma de descongelar las ostras es en el frigorífico. Lo ideal es que las saques de un día para otro, por ejemplo, de la noche anterior hasta el día siguiente a la hora de comer.
Las puedes colocar en un plato hondo (porque van a soltar líquido) y mejor en la parte inferior de la nevera. Es posible que se descongelen en unas horas o durante la noche. Cuando estén descongeladas, recuerda consumirlas lo antes que puedas.
Descongelar las ostras en agua fría
Si necesitas las ostras con urgencia y no puedes esperar a que se descongelen toda la noche en la nevera, también las puedes sumergir en agua fría.
Aunque es un método rápido, no es tan seguro como en nevera, porque si es verano y hace calor las ostras pueden exponerse a temperaturas más cálidas y no es lo mejor. Por esta razón no se recomienda descongelarlas a temperatura ambiente.
Para descongelarlas con agua fría simplemente utiliza un recipiente hermético, llénalo de agua fría y sumerge las ostras. Cambia el agua cada 30 minutos. Es posible que en un par de horas estén listas.
H3: Cómo preparar las ostras paso a paso
Una vez tengamos las ostras descongeladas, se pueden degustar en crudo o cocerlas para tomarlas al vapor.
- En crudo: si las prefieres en crudo, coloca la carne de las ostras sobre un plato con hielo picado, unas gotas de zumo de limón y sal en escamas.
- Cocidas: si las prefieres cocidas, cuece la carne de las ostras al vapor. Sirve con limón o una salsa casera.
¿Cómo comer ostras congeladas?
Para comer las ostras, lo ideal es introducir la carne entera en la boca, para disfrutar de toda la explosión de sabor. Las puedes comer en crudo o cocidas, según prefieras. Y mejor aún con maridaje de vino blanco.
Preguntas frecuentes a la hora de congelar las ostras
¿Se pueden congelar las ostras vivas?
Sí. De hecho, se recomienda congelar las ostras mientras están vivas, para evitar exponerse a bacterias naturales.
¿Se pueden congelar las ostras frescas?
Sí. Se pueden congelar las ostras frescas.
¿Es necesario lavar las ostras antes de congelarlas?
Siempre. Como te adelantamos, es fundamental limpiarlas y aclararlas muy bien, para que vayan impolutas para el congelador.
¿Cuánto tiempo aguantan las ostras congeladas?
El marisco, por lo general, puede aguantar unos 3 meses en el congelador. No obstante, lo ideal es consumirlas lo antes posible para que te pierdan lo mínimo.
¿Puedo congelar ostras que ya fueron cocinadas?
Sí. Aunque para evitar que pierda sabor o textura lo mejor es consumirlas al momento de prepararlas.
¿Se pueden congelar las ostras en su concha?
No. Debes congelar únicamente la carne de la otra, sin la concha. La concha la puedes tirar. También puedes guardar el jugo que suelta al separar la carne.
Esperamos que esta guía sobre si se pueden congelar las ostras haya resuelto todas tus dudas. Ahora ya sabes cómo congelarlas, descongelarlas y prepararlas.
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